Las autoridades japonesas, que han aplicado durante mucho tiempo una política dura contra el covid-19, finalmente capitularon y están preparadas para abrir completamente sus fronteras al turismo a partir de octubre de 2022, después de más de dos años de estrictas restricciones. En particular, se eliminará el límite de entrada diario para los recién llegados, que se incrementó a 50.000 a principios de septiembre. Los expertos han descubierto que los permisos disponibles actualmente son ineficaces.
Por ahora, debido al covid, los turistas deben obtener una visa obligatoria y también preparar una ruta aprobada con anticipación a través de una agencia de viajes acreditada. Las pruebas previas al vuelo para COVID-19 también se han eximido solo para los turistas revacunados con una vacuna reconocida.
Sin embargo, el primer ministro Kishida Fumio ha dicho que planea alinear las restricciones COVID-19 de Japón con las de otros países del G-7. En una conferencia de prensa, Kishida dijo: “Nuestra lucha contra el virus no es fácil, pero no debemos tener miedo". Al mismo tiempo, los expertos señalan que Japón es actualmente el único país del G-7 que aún tiene restricciones a la llegada.
Sin embargo, el gobierno es reacio a decir cuándo se relajarán las medidas. Hasta el momento, Kishida ha dicho que las restricciones fronterizas se relajarán "lo antes posible". Lo más probable es que, a partir de octubre de 2022, Japón elimine todas las reglas de entrada.
Hasta el momento, hay un aumento de turistas, pero su magnitud es modesta. En junio, menos de 300 turistas extranjeros ingresaron a Japón, en agosto, 8.000 turistas visitaron la Tierra del Sol Naciente.